La curadora Katrina Schwarz entrevista a David Shrigley sobre sus obras de taxidermia, enfocándose en su pieza del 2009 “Ostrich”. Este es un extracto de la entrevista completa, la cual está publicada en “Animals” (Animales), el catálogo de la exposición del British Council “Lose Your Mind”.
Esta exposición cuenta con un ícono muy significativo, la escultura en taxidermia Ostrich. Esta ave no voladora, que entierra su cabeza en la arena, no solo ha perdido la cabeza, sino que está ahora, por virtud de la colección itinerante, destinada a volar a tierras lejanas. ¿Es este un destino apropiadamente absurdo para su creación?
Ostrich es en realidad la continuación de una serie de obras que he realizado de animales a los que se les ha quitado la cabeza, o mejor dicho, de animales que han sido creados para parecer como si nunca hubieran tenido cabeza. He creado un gato sin cabeza, un mono sin cabeza, el avestruz sin cabeza y puede que haya un perro sin cabeza en algún momento en el futuro.
En vista de que tengo un perro, ha habido una especie de moratoria en mis obras de taxidermia, tal vez por razones obvias. En el caso del avestruz, su comportamiento de esconder la cabeza en la arena puede invitar a otras lecturas acerca de su falta de cabeza, pero yo trato con cautela los juegos de palabras obvios.
Para mí el planteamiento es acerca de un animal que no tiene cabeza, no necesita un cerebro; nunca lo ha tenido y no lo necesita. Como muchas de las obras que yo realizo, el significado es ambiguo al comienzo, pero mientras uno trabaja la pieza y con el pasar del tiempo, uno la ve en diferentes contextos y su significado puede cambiar y desarrollarse. Eso, para mí, es lo bueno de mostrar mi obra en un ámbito cultural diferente.
“El avestruz es un ave que no es nativa del lugar del que venimos, y me da mucho gusto que haya terminado siendo parte de la colección del British Council porque eso significa que lo cuidarán, su historia seguirá contándose y su significado evolucionará.” – David Shrigley
¿Cómo y dónde se abastece uno de un avestruz o de otro espécimen de taxidermia?
Bueno, uno hace saber que busca un determinado animal. El taxidermista mantiene contacto con clínicas veterinarias, zoológicos, granjas y otros lugares donde se mantienen animales.
Tomó unas cuantas semanas, quizás meses, encontrar el avestruz. Vino de una granja y había muerto de causas naturales, se hizo una donación a la granja y nos dieron el cadáver. No robamos sepulturas, ni encargamos matanzas, todo se hace legítimamente. Yo nunca realizaría una obra si tuviese que causarle daño a un animal en el proceso.
En cuanto a los detalles, hice dibujos de cómo quería que se viera. Generalmente envío un dibujo, en este caso, el de un avestruz sin cabeza, y siempre hay una conversación con el taxidermista acerca de los aspectos prácticos del proceso; si hay suficiente piel para hacerlo debidamente y que se vea como yo quiero que se vea, todo eso resulta extrañamente absurdo.
El taxidermista, Robert Sinclair, aparentemente es el hombre mejor recomendado en el Reino Unido y su empresa (Get Stuffed) se fundó hace muchos años. Yo nunca he visitado su establecimiento y no lo conozco en persona pero he hablado con él por teléfono varias veces.
Estoy en proceso de mudarme a Brighton, por lo que es posible que llegue a conocerlo (como Londres está bastante cerca), aunque puede que coincida con que yo ya no quiera hacer más trabajos de taxidermia. Ya veremos qué pasa. He estado viviendo en el campo rodeado de granjas y granjeros en los últimos meses, así es que puede que me vuelva menos aprensivo ante animales muertos. Veremos…